Según las fuentes de medios, a través de esta demanda interpuesta en un tribunal de Nueva York, la compañía PepsiCo acusa a Coca-Cola y a su unidad Energy Brands por una campaña publicitaria difundida durante las últimas semanas donde se comparan varios de los refrescos de ambos fabricantes.
En el anuncio Coca-Cola se publicita la última versión de su bebida isotónica Powerade como "una bebida completa para deportistas" mientras a la vez y en el mismo anuncio se hace referencia a Gatorade, producto similar de su competidor y asegurando que el mismo "carece de dos electrolitos" (magnesio y calcio) y calificándolo como una bebida incompleta.
Tras interponer la citada demanda, la compañía PepsiCo no ha reparado para lanzar una ofensiva a través de un comunicado en el cual se afirma de forma irónica y a modo de respuesta que "se puede encontrar más concentración de calcio y magnesio en muchas aguas de grifo" que en la bebida fabricada por Coca-Cola.
A través de este comunicado PepsiCo explicaba y confirmaba esta demanda dando a entender que Coca-Cola había practicado "publicidad falsa, un uso no autorizado de la marca que la devalúa, actos y prácticas engañosas, daño a la reputación de un negocio y competencia desleal" según la legislación estadounidense que regula esta actividad y que permite la publicidad comparativa.
La compañía PepsiCo reclama la cancelación y paralización de esta campaña publicitaria basándose en el hecho de que no existen pruebas científicas que demuestren que Powerade sea mejor que Gatorade.
Fuente PuroMarketing.com
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